Al momento de preparar una vivienda para alquilar, es fundamental ponerse en el lugar de quienes buscan un nuevo hogar para compartir con familiares y amigos. Por ello, no se trata de decorar la casa según el propio gusto ni de amueblarla con los muebles sobrantes que ya no utilizamos.
Una propiedad en alquiler debe proyectar una idea de hogar; un espacio cálido y acogedor que invite a habitarlo. Debe ser el escenario perfecto para la vida de quien la ocupará. Es decir, debe permitir que el posible inquilino pueda imaginarse viviendo allí con sus pertenencias y su estilo de vida. Por esta razón, amueblar y decorar una vivienda destinada al alquiler es muy diferente de hacerlo para el uso personal. Mientras que en una casa propia se busca reflejar la personalidad y adaptar los espacios a las necesidades particulares, en el caso de un alquiler el objetivo es crear un ambiente neutro y versátil, atractivo para la mayoría y fácil de personalizar. Así lo explica Catarina Diniz, de Staging Factory, en idealista/news.Claves para decorar una casa en alquiler
Mantener un estilo neutro y poco personalizado es la regla principal del 'home staging', un concepto que busca realzar un inmueble para hacerlo más atractivo a un mayor número de posibles inquilinos o compradores. Esta técnica pretende cautivar a los interesados a través de una ambientación armoniosa y acogedora, que les permita visualizarse habitando el espacio. En este contexto, al preparar, amueblar y decorar una propiedad para alquiler o venta, es esencial seguir los principios básicos del 'home staging' y evitar errores que puedan desvalorizar la vivienda o dificultar su alquiler. A veces resulta complicado desligarse de los gustos personales y de la historia vivida en la casa, pero es importante recordar que, al estar en alquiler, la propiedad debe ser vista como una inversión y no como un espacio personal.Principios esenciales para la decoración de una vivienda en alquiler
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Evita ser demasiado creativo:
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Elimina los objetos innecesarios:
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Menos es más:
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No reutilices muebles antiguos o en mal estado:
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La limpieza y el mantenimiento son clave:
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Recuerda que la casa no es para ti:
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Presta atención a las paredes:
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La iluminación transforma los espacios:
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Prioriza el almacenamiento y la funcionalidad:
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La cocina es un punto clave:
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Evita decoraciones demasiado costosas o personales: