¿Cuáles son los gastos de una hipoteca?

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En España, los gastos de una hipoteca pueden variar según diversos factores, como la entidad financiera con la que se contrate la hipoteca, el valor de la vivienda, el importe de la hipoteca y la comunidad autónoma en la que se ubique la propiedad.

En general, estos gastos pueden oscilar entre el 2% y el 5% del valor del préstamo hipotecario. Por esta razón, es importante verificar los términos y condiciones específicos del préstamo hipotecario antes de formalizar la hipoteca para conocer los costes exactos.

Gastos de formalización de una hipoteca

Los gastos de formalización de una hipoteca son los costes asociados al proceso de obtener y registrar la hipoteca de una propiedad. Veamos a continuación algunos de los gastos de una hipoteca en España:

Gastos de origen

Los gastos de origen son los pagos que el solicitante debe hacer para iniciar el proceso de solicitud de hipoteca. Estos incluyen honorarios de agentes inmobiliarios, gastos de inscripción y otros costes relacionados con la compra de una propiedad.

Tasación de la propiedad

Entre los gastos de una hipoteca, se deben incluir siempre, los gastos de tasación de la propiedad. Esto se debe a que el banco o entidad financiera que otorga la hipoteca puede solicitar una tasación de la propiedad para conocer su valor real y determinar el importe de la hipoteca.

Notaría

El notario es el encargado de certificar la hipoteca y de realizar las gestiones necesarias para que el contrato sea válido y registrado. De manera que, es necesaria la presencia de un notario para formalizar la hipoteca.

Los costes del notario suelen ser una parte importante de los gastos de una hipoteca y pueden variar dependiendo del valor mismo de la hipoteca y de la tarifa de cada notaria.

Registro de la propiedad

El registro de la propiedad es un trámite obligatorio que se debe hacer para que la hipoteca tenga validez legal. Este registro puede tener un coste variable dependiendo de la propiedad, la zona geográfica y la tarifa de cada registro.

Impuestos

Los gastos de una hipoteca en España también incluyen el pago de impuestos. Entre ellos, el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD), que grava los documentos notariales y registrales. Su importe varía según la comunidad autónoma y oscila entre el 0,5% y el 1,5% del importe de la hipoteca. También puede haber otros impuestos que varían según la comunidad autónoma en la que se encuentre la propiedad.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que desde el 2019, según la nueva ley denominada “Ley Reguladora de los Contratos de Crédito Inmobiliario”, el impuesto sobre AJD debe ser asumido por la entidad financiera y no por el cliente, salvo que se trate de una hipoteca de empresa o negocio.

Seguros de vida y fianza

Los seguros de vida son una forma de protección para el prestamista en caso de que el solicitante fallezca antes de que el préstamo sea pagado. También pueden incluir el pago de una fianza para asegurar que el solicitante cumplirá con sus obligaciones de pago.

Esto se conoce como un aval bancario y se requiere para asegurar que el prestamista recibirá los pagos a tiempo. Estos seguros se pagan por adelantado y se añaden al coste total de la hipoteca.

También existen gastos como de gestoría, si se contrata una gestoría para que se encargue de los trámites de la hipoteca. Comisión de apertura, ya que, algunas entidades financieras pueden cobrar una comisión de apertura, que suele oscilar entre el 1% y el 2% del importe de la hipoteca.

¿Cómo calcular los gastos de una hipoteca?

En el cálculo de los gastos de una hipoteca influyen muchos y variados factores. Estos gastos se calculan de acuerdo con el importe del préstamo, el plazo de devolución, la edad, el tipo de interés, la comunidad donde se encuentre la vivienda, etc.

Adicionalmente, el coste total de la hipoteca también se ve afectado por los gastos de origen y los gastos relacionados con la tasación, los seguros y los gastos de gestión.

Por otro lado, los gastos de hipoteca también pueden variar dependiendo de si es primera o segunda hipoteca o si el solicitante elige una hipoteca fija o variable. Las hipotecas fijas tienen un tipo de interés fijo durante el plazo del préstamo, mientras que las hipotecas variables tienen un tipo de interés variable. En fin, son muchos los factores que se deben tomar en cuenta para calcular los gastos de una hipoteca.

¿Quién paga los gastos de una hipoteca?     

Anteriormente, antes de la puesta en vigencia de la “Ley Reguladora de los Contratos de Crédito Inmobiliario” en 2019, los gastos de una hipoteca debían ser pagados por el solicitante. Es decir, que el prestatario, debía pagar los gastos de origen, los gastos de tasación, los seguros de vida y los gastos de gestión. Asimismo, los gastos de notaría y todos los impuestos correspondientes, también debían ser pagados por este.

En la actualidad, después de la entrada en vigencia de la ley, los gastos de una hipoteca son compartidos, entre el prestamista y el prestatario. Lo que significa, una reducción en los gastos de origen, los gastos de tasación, los seguros de vida y los gastos de gestión del solicitante

En consecuencia, los gastos que debe asumir el solicitante en la actualidad son: la tasación, los gastos notariales, registrales y de gestión de la escritura de compraventa. También, los gastos por impuestos como el ITP (Impuesto sobre las Transmisiones Patrimoniales) o el IAJD de la escritura del contrato de compraventa de la vivienda. En los casos de vivienda nueva, en lugar del ITP aplica el IVA que es un 10% sobre el precio de la vivienda.

Por su parte la entidad que concede el préstamo, debe hacerse cargo de los gastos notariales, registrales y de gestión de la escritura de la hipoteca, la copia de la escritura y el IAJD de la escritura de la hipoteca.

 

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